jueves, 3 de julio de 2008

Con paso lento en Anika entre Libros

Una de las fichas más actualizadas de toda la red es la que, como autor, mantiene sobre mí Anika Lillo en su impagable lugar llamado Anika entre Libros. Empeñada está en que aparezcan las reseñas y comentarios de todas mis obras, hace breves fechas subió la que en su momento escribió Ginés Sánchez, que reproduzco a continuación:
Éste es el primer libro de Francisco Javier Illán Vivas (1958). Antes había publicado relatos y cuentos en la prensa regional e, incluso, en algunas revistas ya desaparecidas. Es un poemario en el que casi alcanza una sorprendente madurez, un nivel de sinceridad no esperado en un libro unitario (el amor) de desusada musicalidad.

Su silencioso desembarco en la poesía- este libro no conoció el tradicional acto de presentación oficial- mantiene una especie de aura musical en los treinta y seis poemas que lo componen, con los cinco sentidos a flor de piel, donde se puede saborear un montón de figuras literarias que dan un realce enorme a ese estado del amor que es la línea conductora del mismo.

En "
Con paso lento" encontramos el amor jubiloso, el amor doliente, el amor con claras reminiscencias de Neruda, incluso un poema dedicado a los Cien Sonetos de Amor del poeta chileno; y, como decimos, un elevado nivel de sinceridad, pues desde el primer verso, donde confiesa que se enamoró tres veces, nos asegura que nos va a desnudar el alma, con las yemas de los dedos, en un acto más difícil que desnudar el cuerpo. Es esta una de las composiciones más logradas del poeta. Un poeta inusual en las letras murcianas, pues como han puesto de relevo otros críticos literarios, si ya es extraño que se agote una publicación, por escasa que sea su tirada, mucho más extraño es que la editorial decida hacer una segunda edición. Y este poemario de exaltación del amor se encuentra en su tercera edición, convirtiéndose en un long seller de la poesía regional murciana.

En "
Con paso lento" encontramos un esmerado lenguaje para describir la naturaleza convertida en cuerpo de la amada, llevándonos por ríos, bosques y selvas, mares de sargazos donde perderse, donde sorprende la distancia con que se vive la ausencia o la presencia, jardines orientales paseados con pasos muy lentos, manglares donde los ojos se abrasarán de mirar la sonrisa.

Es "
Con paso lento" un poemario ameno, que despierta la envidia del lector, invitándole a reencontrar la conciencia de lo poético, ahogada en la rutina, a pasearse por una explosión de colores donde se habla a su imaginación.

Ahora, con el paso del tiempo, veo que este libro, Con paso lento, fue algo especial.

2 comentarios:

angel almela dijo...

Paco, me gustaría leerlo.
SOMOS EL TIEMPO
(http://aalmela.blogspot.com)

François de Fronsac dijo...

Veremos qué se puede hacer, amigo Ángel, pues desconozco si quedan ejemplares.